Autonomía en la pandemia

REVISTA POLÍGONO 58

EMPRESAS INDUSTRIALES BAHIENSES EN CUARENTENA

En el inicio de la pandemia se generó una incertidumbre lógica donde el interrogante era cómo sería el confinamiento por el COVID-19 en nuestra ciudad en relación a las compañías.
Como en todo el mundo, según el servicio o producto que brindara la empresa, dependía de si era esencial o no para el funcionamiento del país, con todo lo que esto llevaba.

Cercanos a dos meses de cuarentena ya con otra visión sobre el problema, localmente se pueden avizorar conclusiones, en algunos casos positivas, para pensar en avanzar los que siguieron produciendo e ir acoplándose de apoco el resto.

En contacto con algunas compañías locales, según el tamaño y capacidades, pudieron ir  afrontando el pausado productivo. Tomando una pequeña muestra estadística del área industrial se puede ver que del sector:
– Las grandes empresas pueden sobrellevar mejor financieramente el periodo de receso y en algunos casos seguir produciendo, a un menor porcentaje que lo normal, y teniendo factores externos que también lo acotan.
Las empresas medianas con solvencia a seguir en tiempo y forma pagos.
– Y Pymes o micropymes con diferentes formas de paliar la crisis-pandemia, ya sea mediante créditos bancarios al 24% o asistencia del Gobierno para el abono de salarios, que encuadran en ese acceso.  Una buena parte pudo particularmente abarcar los costos de vida normal de la empresa.

Observando la actividad  en la ciudad, se deja ver la importancia e independencia en la producción, portuaria e industrial, con áreas planificadas, esenciales a nivel global, lo que genera un aplomo del sector y lleva cierta tranquilidad para todas las actividades relacionadas.

Además en la nueva etapa la posibilidad de generar protocolos en espacios amplios de trabajo permite  el distanciamiento, y mecanismos de seguridad que se exigen para continuar el trabajo. Como una visión positiva el empresariado local bien arraigado, las Universidades, la calidad en recursos humanos y la telaraña de fuentes laborales terminan siendo esenciales y evitan en gran parte el desarraigo de sus ciudadanos, creando raíces a nivel local y global.

Editorial Opinión Polígono I.